El origen de nuestro sabor
Nuestra historia no nace en un restaurante, sino en casa. Aprendimos a cocinar con las manos, con especias que viajaban desde Melilla y recetas que pasaban de generación en generación. Con el tiempo, convertimos esa tradición en una carta actual sin perder la esencia. Aquí, el sabor siempre cuenta algo más.
Aliños que hacen la diferencia
Cada uno de nuestros platos lleva una combinación de especias creada por nosotros. Son mezclas que heredamos y adaptamos, con sabores intensos y aromas únicos. No son picantes, son potentes, con ese punto justo que te hace querer repetir. El secreto está en el equilibrio, no en esconder el producto.
Cocina con fundamento
En nuestra carta seleccionamos cada ingrediente con intención, buscando sabor y coherencia en el plato. Cocinamos con técnica, respetando el producto y su origen. Lo que servimos tiene trabajo detrás, pero sobre todo, tiene sentido. Queremos que comas bien y que recuerdes lo que probaste.